Límites I

aep2 tolomeoEl hombre es un ser limitado. En el tiempo, en el espacio y en la mente. En el tiempo, porque su existencia se extiende entre dos fechas determinadas, sin posibilidad alguna de prórroga. En el espacio, porque vive sujeto a la gravedad y a sus propias dimensiones físicas (no puede volar como un pájaro ni moverse como un neutrino). En la mente, porque, por mucho que se esfuerce, su capacidad de comprensión nunca alcanzará a descifrar las razones últimas de la existencia. Cierto que la capacidad de comprensión de cada cual suele quedar muy lejos de lo que puede dar de sí el cerebro humano, de manera que, aunque el cerebro tiene su límite, no es previsible que los individuos lo alcancen.

Pero supongamos que sí. Supongamos que un individuo genial, con todos los saberes de la ciencia y de la filosofía, emprende la tarea de descifrar la existencia universal. ¿Hasta dónde llegaría? ¿Resolvería finalmente el enigma de todos los enigmas? ¿O sería detenido también ante unos límites infranqueables?

Los científicos ingenuos, que son la mayoría, creen que sí, que solo es cuestión de tiempo llegar a resolver todos los enigmas, y llamo “ingenuos” a aquellos que, sin saberlo, practican lo que en filosofía se denomina “realismo ingenuo”, es decir, la creencia de que lo que ven es, en sí, exactamente como lo ven, que los objetos y la idea que tienen de ellos se corresponden perfectamente. Estos científicos, y la gente que piensa como ellos, no creen en los límites, y por ello están convencidos de que, a base de ir investigando, un día quedará todo resuelto.

Y sin embargo, el límite está ahí. Por ejemplo, en el tiempo. Por ejemplo, en el espacio. Por ejemplo, en la causalidad.

Pero lo más curioso de todo es que de los tres conceptos citados lo que de ninguna manera se entiende no es el concepto en sí, sino precisamente, sus límites. Me explico. Uno puede tener una idea de qué es el tiempo, cómo funciona o cómo siente que funciona. Pero si pretende indagar sobre sus límites, empieza el vértigo.

¿Cuándo empieza el tiempo? ¿Cuándo acaba? ¿O acaso no tiene principio ni fin? ¿Es entonces infinito? ¿Qué significa infinito? No hay nada en el mundo empírico que pueda mostrarme un ejemplo de infinitud. Además, en un tiempo infinito todo lo que puede o podría ocurrir por fuerza habría ocurrido ya.

Lo mismo con los límites del espacio.

El espacio, ¿lo ocupa todo? Porque si no lo ocupa todo es que queda algo ahí fuera… que también será espacio. Y si lo ocupa todo, es que es infinito. Pero, ¿en qué consiste lo infinito? Nada hay en el mundo empírico que me pueda mostrar un ejemplo de infinitud. Es verdad que hay una diferencia entre infinito e ilimitado, como la superficie de una esfera, por ejemplo. Pero esto no resuelve el problema fundamental: pensar el espacio como la superficie de una esfera pero en tres dimensiones no excluye la posibilidad de la existencia de otras “esferas”…¿hasta el infinito?

¿Y qué pasa con la causalidad? Pero, sobre esto, otro día. (continúa)

3 comentarios

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3 Respuestas a “Límites I

  1. Artur
    Artur

    El universo es un círculo cuyo centro está en todas partes y su circunferencia en ninguna 🙂

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